Donde está Di-s hay alegría


Todo debe ser hecho con alegría. Aún el remordimiento puede ser con alegría.
La gente imagina un lugar de Divinidad como un lugar serio y solemne. 
En realidad, donde está Di-s hay alegría.
Es por eso que cada momento nuestro es para ser celebrado y colmado de alegría. 
Porque a cada momento estamos cumpliendo nuestra misión de traer Divinidad a este mundo. 
No sólo al ocuparnos
de los asuntos evidentemente agradables, como la meditación, el estudio, la plegaría y los actos de bondad. Sino incluso las actividades mundanas habituales y la manera en que nos ganamos el sustento y llevamos la vida, son maneras de conocerlo y hacerlo parte de nuestro mundo.
Y donde está Di-s, hay fuerza y alegría. (www.es.chabad.org)